La comunidad de Río Gallegos participó este mediodía del acto conmemorativo al cuadragésimo segundo aniversario de la Guerra de Malvinas y Día del Veterano de Guerra y de los Caídos en las islas. Como cada año, se llevó adelante frente al monumento ubicado en la rotonda Samoré, donde se procedió a la colocación de ofrenda florales, a las palabras alusivas y al desfile cívico militar que acompaña la conmemoración.
El sentimiento patriótico por la soberanía de las Islas Malvinas se reaviva cada mes de abril, al conmemorarse un nuevo aniversario de la Gesta que tuvo por objetivo recuperar las Islas. Anoche, frente al monumento a los Caídos, en Avenida San Martín y Rotonda Samoré, se realizó la tradicional vigilia, hubo presentaciones artísticas, una marcha de antorchas, invocación religiosa, palabras alusivas y mucha emoción durante el minuto de silencio que recordó a quienes dejaron la vida en la lucha.
Pasadas las 12.00 horas de este mediodía, se realizó el acto oficial en el mismo escenario. Estuvieron presentes autoridades municipales, provinciales, eclesiásticas, legisladores, jefes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad con asiento en esta capital, y las tropas formadas en el predio. Participaron casi todos los establecimientos educativos de la ciudad, quienes con sus abanderados y profesores coronaron con banderas el monumento.
Los Veteranos de Guerra fueron los protagonistas del encuentro, junto a familiares y amigos. Las actividades por el Municipio y coordinadas por el Departamento Héroes de Malvinas, una dependencia municipal, creada especialmente para mantener viva la memoria y continuar con el trabajo de Malvinizar, a través del Estado y trascienda la generación de los soldados que estuvieron en batalla.
Fue la conmemoración del 42º aniversario de la Gesta de Malvinas en Río Gallegos un verdadero llamado a mantener viva la memoria. En primer término, se recibió a la comitiva de veteranos, encabezada por Sonia y José, los padres del soldado santacruceño José Honorio Ortega.
Se presentó a las tropas y se hizo el saludo oficial. Esta vez estuvo a cargo del jefe de Gabinete, Diego Robles, por ausencia del intendente capitalino, quien dejó un mensaje de unidad y respeto para los ex combatientes presentes. Se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino, se realizó la colocación de distintas ofrendas florales, se realizó una invocación religiosa y se hizo un minuto de silencio por los caídos. Luego, se dirigió a los presentes el hasta la fecha presiente del Centro de veteranos de Guerra “José Honorio Ortega”, Fernando Alturria quien expresó la firme convicción de que algún día dejarán de considerar a Malvinas como un sueño imposible.
Rememorando la gesta heroica llevada a cabo por los argentinos en Malvinas, Alturria destacó la valentía y el coraje demostrado por los combatientes, equiparando su hazaña al cruce de los Andes de San Martín. Señaló que, “pese a enfrentarse a la OTAN, los argentinos lucharon de igual a igual y estuvieron cerca de hacer retroceder al enemigo”. Sin embargo, lamentó que, tras la derrota, “se comenzara la desmalvinización por parte de los gobiernos militares y civiles, quienes ocultaron tanto los errores como los logros de la gesta”.
Alturria denunció la falta de reconocimiento a los héroes de Malvinas y la falta de compromiso con la causa, especialmente en momentos difíciles para el país. El presidente del Centro de Veteranos resaltó la importancia de la malvinización como responsabilidad de todos y destacó “los esfuerzos realizados en Santa Cruz y, en particular, en Río Gallegos, la ciudad más malvinera del país”.
En la oportunidad, agradeció el apoyo del gobierno provincial y municipal en la realización de diversas actividades en honor a Malvinas y se despidió como presidente del Centro de Veteranos, expresando su agradecimiento a todos los que lo acompañaron en su gestión y reafirmando su compromiso con la causa Malvinas. Posteriormente, hizo lo propio el jefe de Gabinete de la Municipalidad de Río Gallegos, Diego Robles, quien sostuvo la importancia de mantener viva la memoria de aquellos eventos que marcaron profundamente la historia del país. “Fernando decía recién y lo dijo ayer en la vigilia también, que acá en Río Gallegos Malvina se enseña en la casa y cómo no hacerlo si muchos de los que estamos acá y me incluyo estábamos en este Río Gallegos, un Río Gallegos muy distinto allá en abril del 82. Cómo no hacerlo si yo 42 años después todavía tengo vívido el recuerdo de los simulacros en el patio de la escuela 15, de las jornadas donde nos juntábamos en la rural para escribir cartas y mandarles cosas a nuestros soldados, de las ventanas tapadas con frazadas a la noche para que la ciudad esté oscura y de la mirada de terror de nuestros padres cuando veían en el cielo un avión que no sabían si iba a ser realidad esa promesa de bombardear Río Gallegos”, recordó.
“Por eso entiendo sobremanera a Fernando y a nuestros veteranos cuando dicen que no son excombatientes, que son y van a ser siempre combatientes de Malvinas, de la causa Malvinas”, dijo y reclamó a “quienes hoy tienen responsabilidades institucionales y los destratan, los olvidan. Algunos ponen de ejemplo a Margaret Thatcher como dirigente olvidándose de la decisión que tomó con el ARA General Belgrano que nos costó la vida de 323 compatriotas. Otros, hace un par de años, proponían entregar las islas a cambio de vacunas. Así es muy difícil que podamos ser tomados en serio por cualquiera que evalúe la legitimidad del reclamo. Ese reclamo que hay desde acá, desde Río Gallegos vamos a seguir sosteniendo siempre porque para nosotros, Malvinas no es solamente el 2 de abril, Malvinas es todo el año, Malvinas es todos los días”, agregó. “Malvinas tiene que ser un faro, un faro para todos los que tenemos diferencias y pensamos distintos en un montón de cosas, pero que en esto estamos todos juntos y lo vamos a estar siempre porque hoy 2 de abril no se vitorea por la libertad, hoy 2 de abril en Río Gallegos se dice viva la patria, se dice viva las Malvinas que fueron son y serán argentinas”, concluyó.
Tras los discursos se realizó el desfile cívico militar del que participaron familiares y amigos de ex combatientes, las escuelas de la ciudad, en sus distintos niveles, clubes, asociaciones barriales, gauchescas, y todas las fuerzas Armadas y de Seguridad de esta capital.